La mascota del salón
Cuidar
de una mascota nos hace ser personas más responsables y diligentes, y
explotar la etapa preoperatoria de los niños en edad preescolar al
máximo, dándole utilidad al juego simbólico, muy característico de esta
etapa, es una gran herramienta para fomentar en ellos diversos tipos de
aprendizajes, que les serán útiles en su vida.
Para
ello, se puede hacer una sencilla actividad en la que se muestra un
perrito de peluche a los niños, diciéndoles que será la mascota del
salón. En las mañanas estará con nosotros, en las tardes se lo podrá
llevar uno de los niños que haya respetado las reglas del salón. Al no
poderse llevar todos a la mascota, se llevará una lista en la que se
marcará quiénes tienen derecho a llevárselo, los demás obtendrán una
estrella.
Cuando
en el salón las voces de los niños comience a subir de volumen, se les
deberá recordar que hay un perrito en el salón, como es un cachorrito
aún duerme mucho y sus gritos pueden espantarlo. Se les da la opción de
cantarle canciones entre todos para arrullarlo.
Hora de jugar
A
las personas nos gusta ser reconocidas por nuestras acciones, y cuando
nos hacen saber qué acción es la que más les gusta a los demás que
hagamos, solemos repetirlas. Por ello es que elogiar a los niños cuando
han hecho algo correcto puede ser funcional en variadas ocasiones, sin
embargo, recibir premios es de nuestras cosas preferidas.
Cuando
somos pequeños lo que más nos gusta es jugar con diversos materiales y
ese puede ser un buen premio para los que han respetado las reglas
durante la jornada escolar.
Esta
actividad muy funcional en el preescolar, consiste en establecer las
reglas claramente desde un principio, diciéndoles a los niños que solo
podrá jugar con el material del salón antes de salir, aquel que ha
terminado sus tareas de manera limpia y ordenada, el que ha escuchado a
sus compañeros cuando participan, entre otras cosas, entonces casi al
irse a casa, se les puede prestar plastilina, bloques de construcción,
piezas de madera, rompecabezas, etc., aquellos que no realizaron lo
solicitado solo podrán ver como se divierten sus compañeros, pues no
tendrán derecho a recibir material y seguramente al día siguiente
respetaran las reglas porque querrán tener derecho a divertirse antes de
salir del salón.
Mochila / cuento viajero
Los
cuentos te hacen ver historias fantásticas en tu mente y esto a los
niños les encanta, por lo que podemos hacer uso del cuento como una
estrategia más para respetar las reglas en el salón, pues si las han
respetado durante la jornada escolar, tendrán derecho a llevarse un
libro a casa y que sus padres se los lean, al día siguiente, el niño
compartirá esa fantástica historia que el cuento le hizo conocer.
Si
el cuento viajero no te parece suficiente, entonces puedes aprovechar
más materiales útiles para el desarrollo de otras habilidades. En una
mochila puedes guardar rompecabezas, palitos de madera, el cuento,
dibujos para colorear, crayolas y aprovecha para que vean la escritura
de su nombre o cosas relacionadas con la motricidad fina, les encantará a
los niños y seguro que harán acciones para convencerte de que les
prestes el cuento o la mochila viajera por las tardes.
El niño del día
¿Quién
no quisiera ser rey por un día?, seguro que a los niños esta idea les
encanta y por ello, podemos utilizarlo como recurso para respetar las
reglas en el salón. La actividad consiste en introducir los nombres de
los niños en un frasco y elegir uno, el que salga será nombrado "el niño
del día", a él se le pondrá una corona de rey o reina, y previamente se
les solicita a sus papás que faciliten la música preferida del niño,
así por las mañanas, el que fue elegido podrá escuchar lo que más le
gusta.
Quien
tenga la oportunidad de ser "el niño del día", será quien ayude a la
maestra a repartir los materiales y llevar la fila cuando se dirijan a
otro lugar, indudablemente a este niño le gustará acomedirse en esas y
otros tipos de actividades
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